Comentario de Música
Es curioso. Sobre el escenario, el británico Elton Johh (61 años) deja de lado sus extravagancias, las rosas sin espinas con tallo de 11 centímetros que adornaron su camerino, los zapatos con plataforma o sus enormes colecciones de lentes con brillantes.
Reginald Kennett Dwight (su verdadero nombre) se ve más sencillo cuando se sienta detrás del piano a cantar sus grandes clásicos. Hasta se da el tiempo para firmar algunos discos de vinilo de un grupo de fanáticos. Se vuelve al backstage con un gorro con los colores de la bandera, que dice "Chile" con letras blancas y se retira haciendo el gesto de la paz con los dedos.
Pareciera que el escenario es el verdadero hábitat de este artista que con más de 250 millones de discos vendidos pareciera tenerlo todo para ser exitoso y retirarse de la escena musical. Pero Elton John es inquieto, trabajólico y prefiere seguir tocando el piano, grabando discos y dando más de 100 conciertos al año.
Las luces se encienden y el piano comienza a sonar en medio de una sinfonía de sintetizadores. "Funeral For a Friend/Love Lies Bleeding", el clásico que abre "Goodbye Yellow Brick Road" – su disco más existoso- despierta al Movistar Arena que seguía embelezado con la voz pastosa del telonero James Blunt.
"Madman Across The Water" y "Levon" son dos temas para fanáticos, que John interpreta en versiones extensas con virtuosos solos. El público recién comienza a tararear "Tiny Dancer", canción que se hizo conocida por la escena del bus en "Almost Famous" de Cameron Crowe.
Los puntos más altos de la noche: la interpretación al piano de "Candle In The Wind", dedicado a Marilyn Monroe; "Goodbye Yellow Brick Road"; "Don´t Let The Sun Go Down On Me"; "Crocodrile Rock" (cantada por todos); "Saturday Night´s Alright For Fighting"; "Honky Cat" (no la interpretaba desde la década de los 70) y "Believe".
Después de una breve pausa, el británico cerró con dos clásicos románticos: "Can You Feel The Love Tonight" de la banda sonora de "The Lion King" y "Your Song", un temazo que compuso en el living de su casa cuando no era famoso ni en el barrio.
En 2 horas y media, el amor se sintió en la noche santiaguina y las 10 mil personas se retiraron satisfechas de haber compartido una jornada musical extenuante pero a la vez necesaria: es en el escenario donde Elton John deja de lado sus excentricidades para sentarse al piano a cantar. Tal como lo hacía hace 40 años cuando componía sus canciones en el living de su casa y nadie lo conocía en el barrio.
--
Juan Paulo Roldán Gómez
Departamento de Prensa
Pontificia Universidad Católica de Valparaíso.
(32)2273937- (07)7267637
No hay comentarios:
Publicar un comentario